En los últimos años, los mercados financieros han sido testigos de una creciente preocupación sobre la estabilidad económica mundial. En este contexto, muchos expertos señalan la posibilidad de un colapso bancario y una nueva crisis financiera en Estados Unidos para el año 2023.
Esta preocupación se debe en gran parte al aumento de la deuda pública y privada en el país norteamericano. Que alcanzó niveles históricamente altos después de la crisis financiera de 2008.
Además, la continua expansión monetaria por parte de la Reserva Federal de EE. UU. para apoyar la economía ha llevado a una inflación creciente y a una erosión del poder adquisitivo del dólar.
¿Silicon Valley Bank (SVB) puede amplificar el colapso bancario?
¿Podría el colapso del Silicon Valley Bank (SVB) desencadenar una crisis financiera como la de 2008? A pesar de ser el mayor rescate bancario en EE.UU. desde la crisis de 2008, expertos aseguran que hay pocas similitudes entre ambos eventos.
La entidad financiera SVB es un banco especializado en el sector tecnológico y sus depósitos provienen mayoritariamente de empresas emergentes conocidas como start-ups.
En un contexto económico global incierto, los inversores de riesgo no están interesados en financiar a estas firmas, lo que perjudicó al SVB, ya que tomó decisiones de inversión equivocadas que le significaron pérdidas.
A pesar de las preocupaciones iniciales, hasta ahora no hay señales de contagio global hacia el resto del sector bancario. Pero ya son más bancos los que han seguido al SVB, por lo que habrá que estar atentos/as.
Las regulaciones bancarias son más estrictas que en 2008 y los depositantes del banco cerrado pueden retirar su dinero. Por lo tanto, la situación actual debería ser realmente diferente a la de la Gran Recesión.
Estos factores, combinados con el aumento de la volatilidad de los mercados, el cambio hacia una economía más digital. Y el aumento de la competencia global, han creado un ambiente propicio para una posible crisis bancaria y financiera.
Un ambiente desalentador y mucha volatilidad en los mercados
En este escenario, los expertos advierten que los bancos podrían enfrentar problemas de solvencia debido a la acumulación de préstamos incobrables y a la exposición a instrumentos financieros complejos y de alto riesgo.
Esto, a su vez, podría provocar un efecto dominó en el sistema financiero, lo que podría poner en riesgo la estabilidad económica global.
A pesar de las advertencias, algunos analistas argumentan que la situación actual es diferente a la de la crisis financiera de 2008. Y que los bancos y los reguladores financieros están mejor preparados para enfrentar una posible crisis.
Sin embargo, la incertidumbre en torno a la evolución de la economía y los mercados sigue siendo alta, lo que hace difícil prever con certeza lo que ocurrirá en los próximos años.
En cualquier caso, lo que está claro es que una posible crisis financiera en EE. UU. tendría un impacto significativo en la economía global. Especialmente en aquellos países que tienen una mayor dependencia de la economía estadounidense.
Por lo tanto, es importante que los gobiernos y los reguladores financieros tomen medidas para mitigar los riesgos. Evitar el colapso bancario y garantizar la estabilidad del sistema financiero global.